Un Lunes diferente...

Hacía ya días que no escribía, pero es que entre uni, academia, niños, futbol, zumba, gym y vida social a veces se hace un poco complicado...

Pero hoy aquí estoy, la última entrada que hice fue referente a los lunes y las mil y una cosas que hacía en ese día, sin embargo este lunes ha sido completamente diferente! Como dice una de mis aupairs de aquí "me prestó” mucho el día el pasado lunes entre inglés, catalán, valenciano y asturiano aquí tenemos una mezcla montada... Pues bueno lo dicho, el día me prestó mucho, desde verano que no pasábamos un día tan en familia como el del Lunes y estuvo genial. Mis peques y su mama  tenían “hunting”, una modalidad ecuestre donde caballos acompañados de perros de cazan (hunters) salen al bosque para cazar a los zorros. Es realmente increíble ver a tantísimos caballos galopando juntos, rodeados de una multitud de perros, la verdad me ha gustado mucho. Yo iba andando por el bosque siguiendo a los caballos, los cuales cada dos por tres perdíamos de vista porque no paraban de galopar. Para encontrarlos nos quedábamos en completo silencio y intentábamos oír el sonido de una especie de silbido que emitía uno de los jinetes y que por lo visto según como lo haga significa una cosa u otra, si era largo quería decir que habían cazado un zorro, si era corto y constante era como animando a los perros que estaban a punto de cazarlo, etc.

Cuando oíamos el sonido, íbamos corriendo hacia allí y veíamos pasar delante nuestro una multitud de caballos, como dicen aquí, "amaizing", eso si, acabamos de barro hasta las orejas, al principio iba con cuidado de no mancharme demasiado, me daba un poquito de asco, al final acabé disfrutando como una niña, pisando los charcos a posta, saltando, corriendo, pasando por los campos de las vacas, donde ahí lo que pisábamos ya no era solo barro, pero llegó un punto que dejó de importarme y simplemente disfrutaba del momento,  una sensación muy buena que hacía tiempo que no sentía. Luego siguiéndolos llegamos a casa de un amigo de la familia, una casa perdida en la nada y un tanto peculiar, desde donde casualmente podíamos ver a los caballos correr al rededor sin tener que ir siguiéndolos, estuvimos ahí tomando un café, viendo pasar manadas de caballos y perros galopando y hablando de todo un poco.

 Me pareció una casa muy diferente de todas las que he visto hasta ahora, muy antigua, con una cocina que funciona con leña, donde justo encima de la cocina tiene el tendedero aprovechando el calor que desprende para secar la ropa, una sala de estar llena de libros donde un montón de libros hacían de una especie de taburete, y donde podías encontrar todo tipo de objetos estaños que no sabes para que sirven, una cocina donde no se ve ni un centímetro de pared de tantas postales que tiene, y que todas son de sitios donde ha estado. Sin duda alguna creo que esta casa, y este hombre son de esas cosas que guardare en mi recuerdo siempre, esas cosas que te marcan, un alma libre, viajera, diferente e única... Después de dejarme sorprender por la casa y esta persona, volvimos a adentrarnos al bosque, esta vez para volver donde teníamos el coche. 

En llegar arreglamos a los caballos y para acabar de pasar el día en familia fuimos a comer a un bar precioso justo al lado del rio. Buen tiempo, solecito, terraza, sonido de rio de fondo, y ver a los peques correr de un lado a otro sin parar de reír, sin duda muy buenas vibraciones. Finalmente volvimos a casa y nos pusimos a ver una película en la salita de la chimenea, una muy buena manera de acabar el día, y mientras veíamos la película limpiando todo el material de los caballos que al igual que nosotros estaba completamente lleno de barro!!

El pasado Lunes no hice ninguna de mis tareas habituales, no cumplí con mis rutinas he obligaciones, no estudié inglés, ni nada de la uni, no hice deporte y no quedé con mis amigas... Pero no me siento mal, el día lo mereció… No hay nada como un día en familia para empezar el half term de mis peques!

Unos peques que con sus miradas, sus sonrisas y todas y cada una de sus muestras de cariño me hacen sentir especial y hacen que toda esta experiencia valga la pena.