El Half Term

Aquí estoy otra vez, hoy vengo a hablaros del half term, en la última entrada os he mencionado que mis niños están de half term, pero alguno de vosotros os preguntareis ¿ Que es eso? Pues bien no os preocupéis, que ahora lo explico. Aquí al igual que en España el curso escolar se divide en tres trimestres “terms” los cuales se separan el uno del otro por un periodo de vacaciones. Pues en Inglaterra además de esas vacaciones que hay después de cada “term” los niños tienen a mitad de cada trimestre una semana libre, lo que ellos llaman “half term” medio trimestre.  

Bien, los niños en esta semana tienen vacaciones pero los padres como os supondréis tienen que seguir con sus trabajos por lo que las au pairs  somos quien nos ocupamos de los niños todo el día. Es una semana un poco loca y movida, sobre todo si no tienes nada planeado y tienes que ir pendiente de la improvisación. Mi recomendación es que se organicen juegos actividades y manualidades en esa semana para hacer que el tiempo pase más rápido y sea más ameno tanto para los niños como para nosotras las au pairs.

Por eso yo la semana antes del half term estuve mirando y remirando actividades, manualidades, juegos, etc. Para llevar a cabo con los niños, y aprovechando que hoy es Halloween pensé en destinar parte de las actividades a esta temática de este modo a los niños les resultaría más atractivo y se lo pasarían mejor. 

Y hoy estoy aquí para decir que ha sido todo un éxito!

Esta semana hemos montado a caballo, jugado con la pelota en el jardín, han montado en bicicleta, jugado a juegos de mesa,  hemos hecho un pastel y hecho manualidades, la verdad que yo no he podido dedicar nada de tiempo a mis estudios ni a ninguna de mis tareas personales diarias, pero he de decir que ha valido la pena, que he disfrutado tanto  como ellos y que a pesar de estar agotada, considero que ha sido una semana genial!

Los niños no dejan de preguntarme cuando vamos a volver a hacer manualidades y pasteles, y eso a mi me alegra porque me demuestran lo mucho que les ha gustado! 

Esta semana de manualidades, actividades y juegos me ha dado una idea, yo para poder hacer muchas de las actividades que he llevado a cabo, tuve que ayudarme de internet para coger ideas, y he pensado que podría estar bien destinar  un apartado en el blog donde añadiera todas las manualidades que he ido haciendo con los peques, acompañadas de fotos y algunos comentarios útiles, de este modo si algún día, como yo esta semana, necesitáis hacer algún tipo de manualidad con los niños podéis ayudaros de este nuevo apartado para inspiraros! 

Y con esto me despido por hoy, Happy Halloween! 

Un Lunes diferente...

Hacía ya días que no escribía, pero es que entre uni, academia, niños, futbol, zumba, gym y vida social a veces se hace un poco complicado...

Pero hoy aquí estoy, la última entrada que hice fue referente a los lunes y las mil y una cosas que hacía en ese día, sin embargo este lunes ha sido completamente diferente! Como dice una de mis aupairs de aquí "me prestó” mucho el día el pasado lunes entre inglés, catalán, valenciano y asturiano aquí tenemos una mezcla montada... Pues bueno lo dicho, el día me prestó mucho, desde verano que no pasábamos un día tan en familia como el del Lunes y estuvo genial. Mis peques y su mama  tenían “hunting”, una modalidad ecuestre donde caballos acompañados de perros de cazan (hunters) salen al bosque para cazar a los zorros. Es realmente increíble ver a tantísimos caballos galopando juntos, rodeados de una multitud de perros, la verdad me ha gustado mucho. Yo iba andando por el bosque siguiendo a los caballos, los cuales cada dos por tres perdíamos de vista porque no paraban de galopar. Para encontrarlos nos quedábamos en completo silencio y intentábamos oír el sonido de una especie de silbido que emitía uno de los jinetes y que por lo visto según como lo haga significa una cosa u otra, si era largo quería decir que habían cazado un zorro, si era corto y constante era como animando a los perros que estaban a punto de cazarlo, etc.

Cuando oíamos el sonido, íbamos corriendo hacia allí y veíamos pasar delante nuestro una multitud de caballos, como dicen aquí, "amaizing", eso si, acabamos de barro hasta las orejas, al principio iba con cuidado de no mancharme demasiado, me daba un poquito de asco, al final acabé disfrutando como una niña, pisando los charcos a posta, saltando, corriendo, pasando por los campos de las vacas, donde ahí lo que pisábamos ya no era solo barro, pero llegó un punto que dejó de importarme y simplemente disfrutaba del momento,  una sensación muy buena que hacía tiempo que no sentía. Luego siguiéndolos llegamos a casa de un amigo de la familia, una casa perdida en la nada y un tanto peculiar, desde donde casualmente podíamos ver a los caballos correr al rededor sin tener que ir siguiéndolos, estuvimos ahí tomando un café, viendo pasar manadas de caballos y perros galopando y hablando de todo un poco.

 Me pareció una casa muy diferente de todas las que he visto hasta ahora, muy antigua, con una cocina que funciona con leña, donde justo encima de la cocina tiene el tendedero aprovechando el calor que desprende para secar la ropa, una sala de estar llena de libros donde un montón de libros hacían de una especie de taburete, y donde podías encontrar todo tipo de objetos estaños que no sabes para que sirven, una cocina donde no se ve ni un centímetro de pared de tantas postales que tiene, y que todas son de sitios donde ha estado. Sin duda alguna creo que esta casa, y este hombre son de esas cosas que guardare en mi recuerdo siempre, esas cosas que te marcan, un alma libre, viajera, diferente e única... Después de dejarme sorprender por la casa y esta persona, volvimos a adentrarnos al bosque, esta vez para volver donde teníamos el coche. 

En llegar arreglamos a los caballos y para acabar de pasar el día en familia fuimos a comer a un bar precioso justo al lado del rio. Buen tiempo, solecito, terraza, sonido de rio de fondo, y ver a los peques correr de un lado a otro sin parar de reír, sin duda muy buenas vibraciones. Finalmente volvimos a casa y nos pusimos a ver una película en la salita de la chimenea, una muy buena manera de acabar el día, y mientras veíamos la película limpiando todo el material de los caballos que al igual que nosotros estaba completamente lleno de barro!!

El pasado Lunes no hice ninguna de mis tareas habituales, no cumplí con mis rutinas he obligaciones, no estudié inglés, ni nada de la uni, no hice deporte y no quedé con mis amigas... Pero no me siento mal, el día lo mereció… No hay nada como un día en familia para empezar el half term de mis peques!

Unos peques que con sus miradas, sus sonrisas y todas y cada una de sus muestras de cariño me hacen sentir especial y hacen que toda esta experiencia valga la pena.

Los Lunes.

Definitivamente, si antes en España ya lo eran, ahora lo son aún más…  si, hablo de ese día, el primero de la semana y sin duda el más duro de todos.

Los lunes por la mañana es como si todo fuera a cámara lenta, y es normal, después de un fin de semana interminable y lleno de miles de cosas por hacer, y trasnochando mas de lo habitual los niños están muertos! Y no son los únicos… después de los domingos de fútbol y de irse a dormir a las tantas acabando trabajos por que los lunes son días de entregas,  cuando suena el despertador los lunes desearía desaparecer, pero como no puede ser, adelante con ellos!  En este día, es cuando las típicas frases de mis pequeños “ I’m so tired” , “ I don’t want go to the school” y  “ please I want sleep a bit more”  son el día que más creíbles suenan.

Pero los lunes todo va a cámara lenta excepto el reloj, que combinado con la lentitud de mis niños parece que se acelera en este día. Las 7.30, hora en la que normalmente los pequeños ya están vestidos y a medio desayunar, y hoy aun los tengo en la cama suplicándome 5 minutos más… minutos que me encantaría poder darles, pero lamentablemente no puedo, así que los saco de la cama y les ayudo a vestirse,  y a achuchones detrás de ellos consigo que se coman los cereales, peinen y cepillen los dientes antes de que llegue la mujer que los recoge y los lleva al cole los lunes.  Los acompaño al coche, les doy sus mochilas con su snak preparado, y les deseo que tengan un gran día en el colegio. Ellos con una sonrisa y medio dormidos me dan las gracias. RESPIRO, pero solo me da tiempo a respirar una vez..  Entro en casa me pongo botas de agua y chubasquero y me voy a los caballos, tengo que revisar que todo esté en orden y darles agua,  cuando por fin acabo de llenar sus cubos me voy volando a casa, botas fuera, chubasquero fuera y rezar para que los caballos hoy no me hayan manchado por que si tengo que cambiarme de ropa no llego a clase! Hoy tengo college en Wrexham un pueblo a unos 40 minutos de casa. Cojo el coche, llego a clase, 2 horas de relax, que por cierto pasan volando. Una vez acaba la clase ir a comprar las 4 cosas que faltan en casa y un bañador para el peque que hoy es su primer día de piscina, llego a casa come algo rápido, prepara las bolsas de la piscina y para el colegio a recogerlos y a llevarlos a natación. Su primer día, tienen miedo y vergüenza, sus manos se agarran fuerte a las mías y me suplican en voz baja que por favor les acompañe a cambiarse, el niño tiene clase antes que la niña así que primero ayudo al peque lo llevo a clase y luego me voy a ayudar a la niña a cambiarse y la acompaño a su clase. Por fin los dos están en el agua cada uno en su grupo,  ves cómo sus miradas asustadas buscan entre las mamas que hay mirando, finalmente su mirada se cruza con la tuya, sonríen. Una sonrisa de alivio al haberte encontrado, una sonrisa de alegría, de sentirse protegidos, saben que estás ahí mirándoles a ellos, y esa mirada tuya les hace sentir importantes, igual de importantes que su sonrisa me hace sentir a mi….

Llega la hora de salir del agua e ir a casa.

Hoy les he prometido que si hacen los deberes y cenan bien podrán elegir postre. 

A pesar de mi promesa, los deberes los lunes son algo complicados, les cuesta y se quejan bastante, yo estoy agotada y ellos no lo ponen fácil, pero entonces respiro hondo… sé que si yo estoy agotada ellos lo están también y ese es el motivo de su comportamiento, así que miro dentro de mi y veo que en mi baúl de la paciencia aun me queda un poco, así que con una sonrisa les ayudo a acabar los deberes.  Les preparo la cena y como he prometido les dejo elegir postre.  Me dan las gracias y para compensarme hoy se ponen el pijama sin quejas, se lavan los dientes y se echan a la cama, están cansados así que no dan mucha guerra, les cuento un cuento a cada uno y después del cuento, Luces apagadas. El día a acabado para ellos.

Yo bajo las escaleras y me voy a los caballos, hay que revisar que tienen agua,  preparo la cena, ceno, escribo un poco que hace tiempo que no escribo, y leo un rato hasta que mis ojos empiezan a pesarme, apago las luces, por fin ha llegado mi hora de dormir y de descansar. 

Un día más en Inglaterra, un lunes menos.

Un lunes agotador, pero un lunes donde esas caras suplicándome 5 minutos mas en la cama, esas sonrisas que me desean un buen día, esas manos asustadas agarrando con fuerza las mías en busca de protección, esas miradas de complicidad, esas sonrisas de alegría y felicidad, todo eso me da las fuerzas que necesito, y me carga las pilas para toda la semana.

Cada día tengo más claro que mi estoy en el camino correcto, mi destino es ser educadora de estas pequeñas personitas que me llenan de felicidad hasta en los peores días.